¿Qué le pasa a la gente?
Voy a escribir en español porque mucha gente necesita leer esto y ENTENDERLO. Voy a hablar de mi y estoy segura de que muchos se podrán identificar.
Para mi, es bien difícil abrirme a conocer a una nueva persona, bien difícil. Si, si, yo sé lo que estás pensando y si, yo soy bien simpática, bien cool, bien buena gente, bien amigable y hasta bien sweet. Aún así, tomar la decisión de darme la oportunidad de conocer a una nueva persona, no solo se me hace difícil, me aterra.
Lean, hombres idiotas, cuando una mujer decide darte la oportunidad de conocerla no la defraudes con cosas triviales e innecesarias. Todos merecemos respeto, pero una mujer que estás empezando a conocer lo necesita mucho más. ¿Sabes por qué? Porque ella te está respetando más de lo que quiere, precisamente porque NO TE CONOCE.
Yo soy bien buena gente pero yo sé lo que quiero, lo que no quiero, lo que merezco y de qué me debo alejar por mi propio bien. Soy una mujer rota que no necesita un hombre para que la recomponga para eso me tengo a mi misma y, mejor aún, tengo a mis amistades. No me doy la oportunidad de conocer a un hombre para eso, sino para tratar de abrirle las puertas al amor. Cosa que, verdaderamente, no sé por qué sigo haciendo pero lo hago una y otra vez permitiendo que hombres idiotas me sigan rompiendo.
El punto no es ese. El punto es que hace un par de semanas, ya los que me han leído, saben que pasé por un 'heartbreak' de grandes magnitudes. Aún así pensé que conocer a una persona nueva, no necesariamente me haría olvidar pero, me haría tener una razón más para sonreír o, que sé yo, me haría tener una nueva ilusión. Pfft, NADA QUE VER, dos días y allá vuelve el desencanto. WTF? ¡DOS DÍAS!
La verdad es que conocer gente nueva sinceramente es apostar por alguien que seguramente no vale la pena. Es apostar nuevamente las ganas de ilusionarse. No voy a decir qué pasó ni cómo pasó, no viene al caso. Lo que si voy a decir es que si en algún momento esto vuelve a suceder, que estoy segura de que volverá a pasar, yo voy a ser más bicha que nadie y eso se lo buscaron porque ya yo estoy bastante grandecita como para jugar con niños inmaduros que se hacen llamar hombres.
¿Qué pasa con la gente? Acaso ya no les vale la pena hacer las cosas bien. Yo no soy la más santa ni nada por el estilo, al contrario, soy bastante bicha, orgullosa, malhablada, rebelde y malcriada pero coño, a pesar de todo, hacer las cosas bien me deja un buen sabor, una buena sensación. ¿Acaso a ustedes no? Dejen, les contesto la pregunta yo misma. ¡Parece que no!
Nada, eso era lo que pensaba hoy mientras lloraba de la rabia que tenía conmigo misma.
-Alejandra
Para mi, es bien difícil abrirme a conocer a una nueva persona, bien difícil. Si, si, yo sé lo que estás pensando y si, yo soy bien simpática, bien cool, bien buena gente, bien amigable y hasta bien sweet. Aún así, tomar la decisión de darme la oportunidad de conocer a una nueva persona, no solo se me hace difícil, me aterra.
Lean, hombres idiotas, cuando una mujer decide darte la oportunidad de conocerla no la defraudes con cosas triviales e innecesarias. Todos merecemos respeto, pero una mujer que estás empezando a conocer lo necesita mucho más. ¿Sabes por qué? Porque ella te está respetando más de lo que quiere, precisamente porque NO TE CONOCE.
Yo soy bien buena gente pero yo sé lo que quiero, lo que no quiero, lo que merezco y de qué me debo alejar por mi propio bien. Soy una mujer rota que no necesita un hombre para que la recomponga para eso me tengo a mi misma y, mejor aún, tengo a mis amistades. No me doy la oportunidad de conocer a un hombre para eso, sino para tratar de abrirle las puertas al amor. Cosa que, verdaderamente, no sé por qué sigo haciendo pero lo hago una y otra vez permitiendo que hombres idiotas me sigan rompiendo.
El punto no es ese. El punto es que hace un par de semanas, ya los que me han leído, saben que pasé por un 'heartbreak' de grandes magnitudes. Aún así pensé que conocer a una persona nueva, no necesariamente me haría olvidar pero, me haría tener una razón más para sonreír o, que sé yo, me haría tener una nueva ilusión. Pfft, NADA QUE VER, dos días y allá vuelve el desencanto. WTF? ¡DOS DÍAS!
La verdad es que conocer gente nueva sinceramente es apostar por alguien que seguramente no vale la pena. Es apostar nuevamente las ganas de ilusionarse. No voy a decir qué pasó ni cómo pasó, no viene al caso. Lo que si voy a decir es que si en algún momento esto vuelve a suceder, que estoy segura de que volverá a pasar, yo voy a ser más bicha que nadie y eso se lo buscaron porque ya yo estoy bastante grandecita como para jugar con niños inmaduros que se hacen llamar hombres.
¿Qué pasa con la gente? Acaso ya no les vale la pena hacer las cosas bien. Yo no soy la más santa ni nada por el estilo, al contrario, soy bastante bicha, orgullosa, malhablada, rebelde y malcriada pero coño, a pesar de todo, hacer las cosas bien me deja un buen sabor, una buena sensación. ¿Acaso a ustedes no? Dejen, les contesto la pregunta yo misma. ¡Parece que no!
Nada, eso era lo que pensaba hoy mientras lloraba de la rabia que tenía conmigo misma.
-Alejandra
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